viernes, 20 de marzo de 2009

Entre-textos espec(tac)ulares



La dama ante el espejo
Como en embriagadora especería
desata sin ruido en la fluidez clara
del espejo sus fatigados gestos;
e introduce allí su sonrisa.
Y aguarda hasta que de todo eso ascienda
el líquido; luego vierte el cabello
en el espejo y, alzando los hombros
maravillosos del traje de noche
bebe callada de su imagen. Bebe
lo que una amante en éxtasis bebiera,
inquiriendo desconfiada, y hace
un guiño a su doncella, si ve luces
sobre el fondo del espejo, roperos,
y lo turbio de una hora trasnochada.

Rainer Maria Rilke

1 comentario:

Meryone dijo...

y a mí el tuyo...

y delvaux y rilke. y todos tus blogs...

besos