domingo, 2 de mayo de 2010

Cómo privatizar con éxito la paz mundial

Cuando la refundación del capitalismo todavía sigue siendo una promesa de la Era Obama, multimillonarios -como Tony Stark- deciden recordarle al mundo que el sistema es válido, pero solo si la ética le acompaña. El futuro está en la inversión en Investigación y Desarrollo, en la tecnología aplicada, en la promesa de un mañana mejor sustentado en el cambio tecnológico. Una promesa heredada del espíritu emprendedor de los sesenta, de ese capitalismo bienintencionado impulsado por la anterior generación.

La otra cara de la moneda, el lado oscuro del sistema, lo representa Justin Hummer -en las carnes de Sam Rockwell-, multimillonario también, pero de los que gustan de los contratos que ofrece el Estado para colocar sus imitaciones. Un pervertidor del libre mercado -ladrón de ideas, tramposo y especulador- que solo piensa en el beneficio propio, en el mal ajeno, cueste lo que cueste. El perfecto villano por contraste. Y, en medio de esta fábula corporativa -con el fantasma del comunismo reducido a un villano de segunda y a una espía reformada- Nick Furia apela al patriotismo desde los márgenes, al deber en compañía de otros –preludio de la obra coral prevista para 2012-.

Conclusión: Si en la primera entrega la codicia residía en una rama retorcida del árbol de familia, este segundo capítulo de las aventuras del millonario caradura -ahora reformado- nos intenta convencer de que existe un capitalismo responsable, marca de la casa. Los héroes no atacan, sino que defienden, como es tradición, el modo de vida americano. Porque los tiempos cambian... para que todo siga igual.

5 comentarios:

JotaGeEle dijo...

Cine americano SIEMPRE CON MORALEJA...

Samu dijo...

La mejor reseña que he leido del contenido político de la peli.

en serio.

De todas, sigue siendop arreisgada. Igual que en la primera, donde el malo estaba dentro de la propia empresa aquí el enemigo vuelve a ser la gente del otro lado de la calle, igual que nosotros, pero con intenciones más oscuras,

me ha gustado, aunque el factor sorpresa desaparece.

Elisa McCausland dijo...

Y lo peor/irónico/sintomático??? Que la pelicula entretiene, mucho, como para despistarse :P

Markitos dijo...

La frase lo dice todo.

Lamasthu dijo...

Un análisis muy interesante.